7 mejores sustitutos de la polenta

La polenta es uno de los muchos productos derivados del maíz perfectos para preparar platos ricos en hidratos de carbono. Este tipo de harina de maíz es uno de los muchos alimentos reconfortantes preferidos durante el invierno, como la polenta caliente para gachas, que se puede tomar salada o azucarada. También es perfecta para hacer barras de pan y otros platos horneados.

Los mejores sustitutos de la polenta son la avena, el puré de patatas, el puré dulce, la crema de trigo, el risotto de arroz, el puré de coliflor y el puré de calabaza.

Tabla de contenidos

Sustitutos de la polenta

En este artículo, te mostraremos cómo puedes sustituir la polenta por platos.

1. Avena

La polenta también es habitual en los desayunos. Sobre todo si se acompaña de leche o nata y fruta fresca. En realidad, es lo mismo que la avena. La avena, cuando se cocina bien, se convierte en una papilla suave que también la convierte en una comida perfecta para un desayuno saludable. Sustituye 1 taza de avena por 1 taza de polenta, lo que da para 2 raciones.

Utiliza copos de avena en lugar de polenta para los desayunos y cocínalos durante más tiempo para que queden tan suaves y cremosos como la polenta. Añade más leche si quieres que la avena quede más cremosa. Luego, no dudes en añadir frutas secas o frescas por encima para darle un toque crujiente a tu desayuno.

2. Puré de patatas

Para los platos salados, seguro que le apetece utilizar patatas para sustituir la polenta. Combinada con carnes y verduras saladas, la polenta es una comida o cena perfecta para un día lluvioso. Si te apetece un poco pero no tienes, el puré de patatas puede servirte.

Las patatas son fáciles de conseguir en el mercado y estoy seguro de que en la mayoría de las cocinas caseras nunca faltan. Siempre que puedas, compra patatas ecológicas para librarte de las sustancias químicas nocivas de los pesticidas. También puedes comprar puré de patatas en polvo para mayor comodidad y ahorro de tiempo.

Con 3 trozos de patatas medianas se puede hacer un cuenco colmado de puré de patatas. Eso ya puede sustituir a una taza de polenta en cualquier comida. Acompáñalo con estofado de ternera, filetes o cualquier tipo de verdura para completar la comida.

3. Puré de patatas dulces

Si te gusta una opción más sana, con menos carbohidratos y más fibra, opta por las batatas en su lugar. Al igual que las patatas normales, las batatas pueden ser una alternativa perfecta para la polenta. Lo bueno es que puedes utilizar boniatos tanto para platos salados como dulces.

Se puede tomar para desayunar, acompañada de frutos secos, o como almuerzo, con nata y bacon frito crujiente. Además, es fácil de encontrar en el mercado en cualquier época del año. Sin embargo, el puré de patatas dulces envasado es bastante raro, a diferencia de las patatas normales.

Utilice 2 patatas grandes para hervir y triturar para sustituir una taza de polenta. Siéntete libre de prepararlo como quieras. Puede ser un desayuno, un postre o un carbohidrato salado para el almuerzo o la cena.

4. Crema de trigo

Uno de mis mayores descubrimientos a lo largo de mi viaje en la cocina con la comida instantánea es la crema de trigo. Es como una versión en polvo de la avena, pero mucho más cremosa y deliciosa. De hecho, es una marca propia que viene con diferentes sabores, desde salados hasta dulces. ¡La tienen todos!

Lo considero un alimento de supervivencia por su larga vida útil. Aunque sea comida instantánea, contiene muchos nutrientes, como fibra, porque procede del trigo. Además, es fácil de preparar, todo lo que necesitas es agua hirviendo y algunos ingredientes si te gusta algo crujiente.

Una taza de crema de trigo puede sustituir a 1 taza de polenta. Puedes prepararla para desayunos y comidas saladas. Yo siempre la trato como avena a la que añado variedades de frutos secos e incluso nata extra para hacerla más cremosa. Para platos salados, me gusta sustituirla por filetes en lugar de usar polenta o puré de patatas.

5. Gachas de arroz

Otro sustituto de los carbohidratos perfecto para la polenta es nada menos que el arroz. El arroz es un tipo de carbohidrato muy diverso que se puede cocinar salado o para postres. Puedes conseguir arroz en polvo o harina de arroz, pero yo prefiero usar el arroz real y hacer gachas cada vez que tengo antojo de polenta. Sobre todo, es uno de los carbohidratos más accesibles que puedes conseguir en el mercado, además de ser una alternativa más barata.

Las gachas de arroz son muy flexibles a la hora de añadir sabores. Es un buen desayuno de invierno si le añades cacao, miel y leche. Tendrás una taza caliente de gachas de arroz con cacao. Para el lado salado, prueba a saltear pollo, ajo, jengibre y arroz y luego hiérvelo hasta que se convierta en gachas. Es una comida excelente, sobre todo si estás enfermo y no puedes comer ningún alimento sólido.

El arroz absorbe más agua y duplica su tamaño con bastante rapidez. Así que cuando lo sustituyas, considera usar media taza de arroz en lugar de una taza de polenta. Si has elegido un tipo de arroz que se resiste a crecer, no dudes en añadir más contenido a las gachas para aumentar la ración.

6. Puré de coliflor

Cuando intento vigilar mi consumo de carbohidratos, suelo recurrir a la coliflor como fuente de carbohidratos más saludable. Su popularidad ha crecido entre dietas como la vegana, la vegetariana y la paleo. No me sorprende, porque la verdura en sí está repleta de nutrientes y es baja en calorías y grasas poco saludables.

Tanto si compra en mercados de agricultores como en tiendas de comestibles, en los expositores de verduras nunca faltan las coliflores. Es habitual verla en el pasillo de las verduras y es imposible que falte un solo día. Bastante accesible y barata.

Para preparar la coliflor, córtala en trozos pequeños y hiérvela hasta que esté blanda. A continuación, el proceso en el procesador de alimentos para hacer puré la coliflor. Cuando se hace puré, casi se parece al hummus por su cremosidad. Es un sustituto perfecto de la polenta para acompañar guisos salados y carnes a la parrilla de forma saludable.

7. Puré de calabaza

Por último, pero no por ello menos importante en nuestra lista, está la calabaza. Cuando se sigue este sustituto de la polenta, en realidad se parece al puré de patatas dulces. Salvo que la calabaza puede resultar más cremosa. También es baja en calorías pero alta en nutrientes, por lo que no es de extrañar que haya entrado en nuestra lista.

Durante la estación otoñal, abundan las calabazas de todos los tamaños y formas. Aprovecha una buena cosecha y prueba a utilizarla en tus recetas con polenta. Lo mejor es hacer gachas para el desayuno o el almuerzo y luego mezclarlas con un poco de arroz y carne. También es buena como maridaje salado para otras carnes y verduras.

Sustituye 1 o 2 tazas de puré de calabaza por 1 taza de polenta. Duplica la ración porque la calabaza es más ligera que la polenta. Hazlo más sustancioso añadiendo trozos de calabaza en lugar de puré.

Ahora que ya tienes una lista de sustitutos perfectos de la polenta, empieza a recrear tus recetas con polenta utilizando uno de los elementos de la lista. Satisface esos antojos probando algo diferente pero eficaz.

Lorena

Hola, soy Lorena y me encanta cocinar. Empecé este blog para ayudarte a encontrar los ingredientes adecuados para tus recetas y ayudarte a ser un mejor cocinero. Espero que este blog te resulte útil y, si tienes alguna pregunta, ¡no dudes en ponerte en contacto conmigo!

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